Personalmente, yo le tengo un especial cariño a este muchacho, ya que mi primer novio practicaba surf y Slater era uno de sus favoritos, junto con Sunny García o el veterano Tom Curren. Aunque parezca mentira, también había algún que otro español en la élite del surf, sobre todo oriundos de Galicia, Asturias o el País Vasco, en cuyas playas se pueden coger las mejores olas. Recuerdo a Eneko Acero, que por entonces era un chavalito que despuntaba y que fue durante años el mejor valor de este país en el surf, seguido luego por sus hermanos Iker y Kepa.
Durante años me moví en ese ambiente surfero y leí muchas revistas especializadas como Surfer Rule o 3sesenta, que ahora tienen su edición en internet pero que en aquella época eran en papel y de escasa distribución en muchos lugares. Aprendí que las olas tenían paredes, creaban tubos (que no túneles) y que las tablas también tenían quillas que ayudaban a mantener su estabilidad. Por entonces vi también la mítica película “El gran miércoles”, dirigida en 1978 por John Milius, que abordaba la evolución de la amistad de tres amigos surfistas con el paso de los años. La película estaba protagonizada por algunas estrellas del celuloide en ciernes como William Katt, que un par de años después se convertiría en “El gran héroe americano”, o Gary Busey, que participaría también en 1991 en otra película que tocaba el tema del surf “Le llaman Bodhi”. Ambos films se convirtieron en todo un referente para los aficionados, muchos de los cuales consideran el surf un estilo de vida más que un mero deporte. Yo también intenté “surfear” en un par de ocasiones, pero el resultado más que surfear lo consideraría supervivencia sobre una tabla y evitación del ahogamiento...
El joven Kelly Slater ascendió enseguida gracias a su rompedora visión del surf y a su innovación. Se ligó al potente patrocinador Quiksilver y a mediados de los noventa era toda una figura en este deporte, minoritario pero con seguidores muy fieles como suele ocurrir con todas las actividades deportivas “menores”. Pero muchos quizás recuerden más a este fantástico surfista por su participación en la serie “Los vigilantes de la playa” a principios de los noventa, en la que aprovechó su imagen y su recién adquirida notoriedad para ganar muchos más fans, sobre todo femeninas.
Lejos de despistarse con toda esa parafernalia mediática, Kelly Slater ganó durante cinco años consecutivos el ASP World Tour, el campeonato mundial de la Asociación de Surfistas Profesionales, entre 1994 y 1998, y continuó surfeando al más alto nivel mientras compatibilizaba otras tareas. Incluso llegó a grabar un disco junto con un par de colegas surfistas y a protagonizar algunas películas como secundario, además de producir documentales y ser el inspirador de un videojuego con su nombre.
Fue el rey absoluto de las olas hasta que con la entrada del nuevo siglo le salió un duro competidor: el hawaiano Andy Irons. Ambos vivieron una década de vibrante rivalidad, mientras Irons se confirmaba como sucesor natural del talento de Slater. Lamentablemente, su ritmo de vida y su coqueteo con las drogas no le permitió llegar a ser nunca el mejor y el dengue truncó la carrera de Irons hace apenas unos días, justo antes de la celebración del último campeonato mundial en Puerto Rico que acabó ganando Slater.
Pues hoy me apetecía escribir esta entrada actual pero con un toque de nostalgia sobre el mejor surfista de todos los tiempos, Kelly Slater, con mi visión personal y mi acercamiento al mundo del surf hace ya un montón de años. Para concluir, un precioso vídeo con algunas olas cogidas por el fenómeno Slater y su eterno rival Irons en la famosa rompiente de Pipeline, en Hawaii, una de las playas más frecuentadas por los surfistas. Parece fácil, eh?
Surf (L)
ResponderEliminarYo tengo en la pierna una marca que me hice con una quilla una vez que intenté (sin éxito xD) practicar este deporte que me enamoró de más pequeña :)
Hay deportes que sólo verlos ya sabes que nunca aprenderás a practicarlos. El surf es uno de ellos. En cualquier caso gracias por acercarnos a este desconocido, para mí, mundo. Date cuenta que pensaba que la "cuna" del surf en España eran las Canarias y Cádiz.
ResponderEliminarSaludos
Pecas, la primera vez que yo me metí en el agua con la tabla no cogí más que espumones, que aquello no eran ni olas XD Y de pie ni una, claro: sentada, tumbada, de rodillas... Era absolutamente incapaz de mantener el equilibrio allí encima, jajaja. He visto por tu flick a alguien practicando pastilla! Aquel novio también me enseñó (o intentó enseñarme, más bien) a hacer eso, pero mi equilibrio era igual de malo para eso también y acabé llena de moratones, jaja.
ResponderEliminarSese, Canarias y la zona sur de Andalucía son más para Windsurf, por el tema de los vientos, aunque supongo que también tendrán playas con olas buenas para el surf. Hay mucha gente que los confunde, no te creas, lo mismo que el bodyboard, cuya tabla es muy distinta a la de surf y se practica tumbado boca abajo sobre ella. Yo también soy incapaz de practicarlo, pero me gusta verlo, es muy impresionante :D
saluditos!
Interesantísimo. Me quedo con el nombre: Kelly Slater. Yo también me veo incapaz de ponerme sobre una tabla. Por mucho que practicara.
ResponderEliminarSaluditos, Lillu.
Kinezoe, es que no es nada fácil! Y yo también creo que ni con la práctica sería capaz, jajaja.
ResponderEliminarsaluditos!