“Firefly”
es una de esas series de culto que hay que ver. Aunque pudiera parecer más
antigua, se rodó a principios de este siglo y se emitió una única temporada
entre 2002 y 2003, bajo la forma de un western espacial. La serie fue
cancelada tras emitirse 14 episodios debido a los escasos índices de audiencia, cuando apenas se habían
desarrollado las tramas principales de un grupo protagonista absolutamente
genial y cargado de carisma.
La acción nos sitúa en un nuevo sistema solar dentro de 500 años, cuando una nave llamada Serenity, de la clase Firefly,
surca la galaxia en busca de negocios de dudosa legalidad. La ecléctica tripulación de Serenity está capitaneada por el excombatiente de la guerra civil Malcolm Reynolds. A su mando, su fiel compañera de batallas Zoe; el marido de ésta y piloto de la nave, Wash; el
pendenciero Jayne; la inocente mecánica Kaylee; la acompañante (que no
prostituta) Inara; y los viajeros accidentales, el Pastor Book y los hermanos
Simon y River Tam.
***
Spoilers! ***
El grupo,
que se dedica a realizar pequeños robos por encargo para subsistir, se mantiene
alejado del interés de la todopoderosa Alianza gracias al prestigio que les aporta
Inara, una acompañante de alto standing muy bien relacionada. Sin embargo, la
presencia a bordo de un par de pasajeros imprevistos les convertirá en objetivo
de todos los cazarrecompensas de la galaxia. Simon y su hermana adolescente
River, con extraordinarios poderes psíquicos debido a los experimentos que el Gobierno
desarrolló con ella, harán que no puedan pasar desapercibidos tan fácilmente
como antes.
La
temporada apenas da para iniciar unas cuantas líneas argumentales. En la que
más se profundiza es en el estado mental de River y sus extrañas actitudes, que
su hermano, un brillante médico, intenta desentrañar. Sin embargo, también
tenemos al Pastor Book, un religioso entrado en años que intuimos posee una
doble identidad que no llegamos a conocer en la serie, y la tensión sexual no
resuelta entre el capitán Mal Reynolds e Inara, otro de los frentes que
seguro habría merecido más espacio en “Firefly” de haber continuado las
emisiones.
*** Fin de
Spoilers! ***
La serie
combina perfectamente la ciencia ficción de un futuro avanzado en tecnología
pero vuelto a sus inicios en otros muchos aspectos. No se han conseguido superar las diferencias económicas o sociales a pesar del paso del tiempo y los progresos científicos. El entorno western, con
aires steampunk ocasionales y leves (o no tan leves) inspiraciones en sagas
como la de “Star Wars”, le da a “Firefly” un toque muy especial. El aderezo de
humor negro no podría estar mejor encajado y los personajes están muy bien
pincelados. Todos se dejan querer, incluso aquellos que pudieran parecer más
mezquinos como Jayne. Vale, tenía que nombrarlo porque es mi favorito: tan
primario, tan inconsciente, tan manipulable y, oye, tan atractivo para mi
gusto! Esa perilla... :P
Casi todo
el éxito de “Firefly” sobrevino tras la cancelación de la serie, durante su
distribución en DVD. Los fieles seguidores de los personajes escritos por JossWhedon (creador también de otra serie de culto, “Buffy, cazavampiros”) hicieron
fuerza para que la serie continuara y, aunque no lo consiguieron, el director
sí que realizó un par de años después una película cortando algunos de los
flecos que la serie había dejado, sobre todo en lo referente a River y el
origen de su comportamiento. Aunque la película puede verse de forma independiente,
los protagonistas son los mismos y la mayoría de las historias continúan casi en el mismo
punto donde las dejó el programa televisivo.
En definitiva,
una serie muy recomendable, con capítulos de alrededor de una hora cada uno,
muy bien ambientados y entretenidos, con tramas autoconclusivas en cada uno dentro
de la línea argumental general. Y por supuesto, mejor en versión original.
Puntuación:
10 sobre 10.