Hoy comienzo mis últimos días de vacaciones del año, agridulces porque tendré tiempo libre pero lo pasaré lejos de una parte de mi familia. La morriña me invade por momentos y no puedo evitar sorprenderme de lo mucho que ha hecho la distancia por acercarme a un sentimiento que creía no poseer. Sé que están ahí, que me echan de menos tanto como yo a ellos y que no puedo estar triste porque nos veremos pronto, pero mientras, intento que las lágrimas no acudan disimuladamente a mis ojos cuando llueve. Y dicho esto fuera nostalgia, fuera pesadumbre, fuera tristeza!. Seré feliz para dedicaros una sonrisa cada día, como propugna mi querida y admirada Brandelia. Porque mi momento de cuestionarme el porqué de las cosas ya ha pasado y sólo queda aprovechar cada minuto para disfrutar de lo que la vida nos da, que no es poco.
Sé que me leéis, os quiero.
Te leemos en la medida que nos permite el tiempo (al menos en mi caso), pero puedes estar segura de que nos acordamos de ti y te queremos.
ResponderEliminarArriba esos ánimos siempre, que así es como deseamos verte.
Un besazo.
jotacé.
Gracias por leerme, Jotacé (en la medida en q te lo permite el tiempo; eso de ser un hombre tan ocupado no puede ser weno :P)
ResponderEliminarMis ánimos estarían mejor si tuviera un pasaje para Santiago en mis manos, pero como no lo tengo sólo me queda ser fuerte y tener paciencia, q de ambas cosas he tenido q aprender.
De nuevo, gracias por tu mensaje. Bezitos
ai, raíña, ás veces lémoste cando podemos, pero sempre te lemos e sempre sempre te queremos. e a distancia agora non é nada. eles pensan en ti, nós pensamos en ti e ti pensas neles e en nós;) bicazos e a sorrir!!
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