Mis padres han estado recientemente de viaje por Praga y Budapest, en uno de los tradicionales combinados de una semana que ofrecen ahora las agencias de viajes a muy buen precio (lo pagamos mi hermana y yo, así que os aseguro que el precio era bueno :P).
Además de volver encantados, tanto con la organización y los hoteles como con lo que pudieron visitar, se tomaron la molestia de enviarme un paquete con algunos regalitos típicos y folletos de los lugares donde estuvieron. Es una costumbre en la familia ir cogiendo todos los folletos, publicidades o cualquier otro signo de estancia en otro lugar para guardarlo como recuerdo del viaje.
Pues esta semana pasada recibí un paquete en el que se incluían dos DVDs turísticos con lo mejor de las dos ciudades, Praga y Budapest, varios folletos de hoteles, restaurantes y actos culturales, además de una marioneta tradicional del denominado Teatro Negro de Praga. Estas representaciones se caracterizan por desarrollarse en un escenario totalmente negro, con una iluminación estratégica que juega con las luces y las sombras.
También me enviaron un par de muestras de dulces típicos: unos bombones Fazer que originalmente se empezaron a fabricar en Finlandia y luego se trasladaron a otros países escandinavos y centroeuropeos; y un pan de una pastelería muy conocida en Budapest, Gerbeaud, fundada en 1858 con estilo parisiense e influencias rusas.
Los ingredientes principales de este dulce son harina, nueces, azúcar, leche, huevos, pasas, mantequilla, limón y levadura. He tenido que probarlo, no he podido evitarlo… Y está increíble! Cuenta la historia que la emperatriz Sissi frecuentaba esta cafetería cuando viajaba a Budapest para encontrarse a escondidas con un amante que allí tenía.
El paquete incluía también un tarro de la crema facial Helia D, una marca cosmética muy conocida en Hungría y de muy buena calidad. La crema es muy barata (unos 8 ó 9 euros) y se incluye en las recomendaciones de las embajadas del país para adquirir como producto típico. Ayer la probé y no me disgustó, la verdad, aunque a largo plazo no sé si tendrá todos los efectos que promociona como anti-edad, reafirmante, etc.
Mis padres me mandaron también un puzzle que no había podido traerme en mi último viaje a Santiago y algunas otras cosas que se me quedaron fuera de la maleta. Gracias por el envío :*
Magazine - Rhythm of cruelty (1979)
Hace 4 horas
Espero que hayan ido a los clubs de música que recomendé :-P
ResponderEliminarJajajaja Sergio :D Dicen que para volver al hotel que tenían en Budapest tenían que pasar por una calle enorme típica de botellón... seguro que te suena, jaja. Tampoco se asustaron mucho, no te creas; lo de vivir en Santiago (ciudad de estudiantes y juerga por excelencia) hizo que fueran mentalmente preparados para todo :D
ResponderEliminarAún así, les di tus consejos sobre la comida y alguna otra peculiaridad, y creo que les sirvieron :)
saluditos!
Es que vaya dos ciudades. Espléndidas, primorosas, geniales.
ResponderEliminarLo mejor de Europa, sin duda. Menudas hijas¡¡¡¡¡¡¡
Querida amiga: Te ruego seas prudente en los comentarios sobre Sissi y yo, no queremos que se sepa lo nuestro.
ResponderEliminarLa crema Helia D es muy buena, yo me mantengo casi joven gracias a ella.
Los bombones, si no te los vas a comer todos, dicen Sula,Nina,Gus,Oni,Sami,Isi y Bas que se los mandes,como material didáctico.
¡Angelicos!
Un besote.
Sommer, es que mis padres se lo merecen todo, jeje, sobre todo este año que cumplían nada menos que 40 años de casados :) Los viajes para esa zona están ahora mismo bastante baratos. Hicimos una intentona con Italia, sobre todo Florencia y Venecia, que era otro destino que les apetecía, pero los precios ahí están por las nubes.
ResponderEliminarPedro, perdón por la indiscreción, pensé que lo tuyo con Sissi era de dominio público... :P Lamentablemente, tus peques se quedarán sin bombones porque la caja ya está en las últimas. Yo no tengo perros ni gatos, pero tengo un humano en casa que siente pasión por los chocolates, jaja.
saluditos!