Llevaba mucho tiempo queriendo ver esta película, de la que mucha gente de mi entorno hablaba maravillas. Aunque ya han pasado veinte años desde su estreno, no me ha parecido que el paso del tiempo se haya cebado excesivamente con ella, como sí ha ocurrido con algunas cintas contemporáneas suyas. Eso sí, “La escalera de Jacob” toca una temática muy de la época que se exprimió hasta la saciedad, la guerra de Vietnam, aunque en este caso sólo tangencialmente y como trasfondo de la historia, puesto que no es un film de género bélico.
*** Spoilers! ***
Tim Robbins interpreta a Jacob Singer, un ex combatiente de Vietnam que intenta rehacer su vida a su regreso. La muerte de su hijo pequeño mientras él estaba en el frente y su posterior divorcio no le ayudan a superar su terrible experiencia en la guerra. Las pesadillas lo acosan cada noche y comienza a sufrir extraños sucesos, que le hacen vivir en una continua paranoia y desequilibran su ya de por sí maltrecha existencia.
Hablando con sus antiguos compañeros de trinchera, llegan a la conclusión de que algo fuera de lo normal sucedió el día en que sufrieron una emboscada y muchos de ellos murieron. Piensan que una conspiración se cierne sobre los que sobrevivieron y que el Gobierno intenta ocultar los experimentos químicos en que los soldados actuaron como cobayas sin saberlo. De la sospecha a la locura sólo hay un paso, que Jacob está cruzando sin remedio: su particular descenso a los infiernos ha comenzado.
A muchas personas les pareció que la película era confusa y desordenada, algo que puede tener algo de cierto cuando uno no se mete de lleno en la trama. Es precisamente la combinación deliberada de sueño y “realidad” la que ocasiona esa falta de ubicación del espectador. Algunos comentarios que he leído asemejan esta película con “El sexto sentido” o “Los otros”, cuando en realidad y desde mi humilde punto de vista, no tienen en absoluto nada que ver. Jacob está muerto, es cierto, pero en ningún momento se relaciona con los vivos: todo lo que le ocurre es fruto de su agonía, como se puede comprobar en la última escena. Hasta entonces, su mente ha vivido en un constante tira y afloja, una lucha con la muerte ante la necesidad de reordenar su vida, y dar explicación a todos sus fracasos antes de irse. Precisamente esa toma final es la que pone solución a todo el entramado anterior, cerrando el círculo de la duda.
*** Fin de Spoilers! ***
Hoy en día puede que el ambiente de la película suene a demasiado ochentero, pero recordemos que ese clima cálido, penumbroso, en constante claroscuro, es una característica fundamental del cine de Adrian Lyne (sus otras películas de la década siguen el mismo patrón visual: “Flashdance”, “Nueve semanas y media” y “Atracción fatal”). “La escalera de Jacob” se estrenó en 1990 pero conserva evidentemente ese aire sucio de los ochenta. Además, entre los puntos fuertes de esta producción, para mi gusto, está la naturalidad de las actuaciones: se desnudan cuando tienen que estar desnudos, lloran cuando tienen que hacerlo y se insultan cuando se enfadan. Las alas de esa espontaneidad se cortan cada vez más en el cine, por culpa de presiones sociales que a veces rozan lo ridículo.
En las interpretaciones nos encontramos quizás con uno de los mejores papeles de Tim Robbins y una convincente Elizabeth Peña, además de unos cuantos buenos secundarios como Danny Aiello o Ving Rhames. Como curiosidad destacar que también aparece en la película un pequeño Macaulay Culkin, justo en el papel anterior al de “Solo en casa”, que le otorgaría con apenas diez años aquella fama desmedida que tanto le costó manejar.
“La escalera de Jacob” es, sin duda, un clásico del cine de suspense y terror psicológico imprescindible. Además es una de esas películas con mucho debate, ideal para comentar después en reuniones de amigos porque siempre hay alguien que le encuentra detalles que otro no ha captado. Lo dicho, muy recomendable aunque advierto que también muy inquietante.
Pues gracias ya tengo peli para esta noche parece interesante. Nunca la había oido nombrar, pero si encima sale el Macaulay Culkin es un incentivo más XD.
ResponderEliminarMenos mal que habisas de los spoilers, es una cosa que se agradece.
Chau!!!
Mira, la vi hace bastantes años en la tele pero me la bajé hace apenas unas semanas para voverla a ver después de leer en nosequé sitio sobre el significado bíblico de la escalera de Jacob.
ResponderEliminarSólo recuerdo que me no me estaba gustando, hasta el final, que tampoco recuerdo. Así que será como verla de nuevas :)
No he visto esta película aunque se de su existencia gracias a que es muy conocida, pero tras tu recomendación creo que tendré que verla próximamente.
ResponderEliminarAngel, si nunca la habías oído nombrar en tu entorno pues igual no te gusta... Para la gente de mi generación es un clásico :D
ResponderEliminarAngus, hmmm pues lo del significado bíblico no sé yo, la verdad. En la película explican lo de la "escalera" por otra vertiente. Ya me contarás si tú se lo encuentras :)
Sr. Nocivo, a mí me ha gustado mucho, pero a veces me da miedo recomendar estas películas de terror psicológico porque no todo el mundo las tolera igual. Espero que no me odies si no te gusta XDD
saluditos!
Hola Lillu
ResponderEliminarGracias por la recomendación. Te informo que acabo de dejar un comentario en tu entrada acerca de ABBA
Buff, la ví cuando salió en video y apenas la recuerdo, sólo aquello de la confusión y desorden que comentas aunque creo que tal caos no era gratuito: acentuaba el hecho de confundir realidad y "locura" que el propio film recrea y la delgada línea que separa ambos mundos. Buena película y un gran Tim Robbins.
ResponderEliminarSaludos
Ali Reyes, de nada y tu comentario sobre ABBA llegó bien y ya está contestado :)
ResponderEliminarSese, si yo la hubiera visto en aquel momento te puedo asegurar que tampoco me acordaría, que mi memoria cada vez hace más aguas!
saluditos
Guardo un grato recuerdo de esta película. Me encanta su atmósfera de locura y confusión. Tim Robbins lo bordó.
ResponderEliminarSaludos.
Mira que lo ponías bien clarito, que era un spoiler. Pues me lo he leído y después he pensado ¡Ay, no! :-)
ResponderEliminarMe gusta Elizabeth Peña, creo que hubiera merecido más oportunidades.
Kinezoe a mí la verdad que me sorprendió muy gratamente Tim Robbins, porque no me esperaba que su actuación fuera tan redonda.
ResponderEliminarLoquemeahorro, aysss mujer, que no estaba muerto, estaba de parranda... :P No sé muy bien qué fue de esa mujer, Elizabeth Peña, pero en esta película está muy creíble y natural para mi gusto.
saluditos!