Leí “Sostiene Pereira” hace muchos años, unos doce si no me engaña la información editorial del libro. Formaba parte de una colección de kiosco de RBA, empresa que suele editar libros interesantes, muy bien encuadernados y a muy buen precio, y que habitualmente se venden en kioscos en entregas semanales. Soy fan de este tipo de colecciones, sobre todo porque son económicas y acercan los buenos libros a todos los bolsillos.
El caso es que recordaba esta novela de Antonio Tabucchi de forma satisfactoria y decidí releerla para ver si mi opinión se mantenía en la misma línea. Tenía otro motivo para volver a leer esta obra también: no me acordaba de nada del argumento. Ni a medida que avanzaba esta segunda lectura conseguí intuir el final del libro, algo que puede ser tan positivo como negativo, según como se mire. Para no dar más rodeos, confirmo que el libro me volvió a gustar muchísimo y su personaje principal, Pereira, me parece un tipo de lo más entrañable.
*** Spoilers! ***
Pereira es un periodista entrado en años que, tras una extensa carrera al frente de la crónica de sucesos de un gran periódico, dirige ahora la página cultural de un modesto diario local. Corre el año 1938 en Lisboa y la dictadura de Salazar sume al país en una situación complicada, aunque no tanto como la vecina Guerra Civil que sufre España. Pereira, aunque de ideas más o menos liberales, vive al margen de la situación política y dedica todo su tiempo y esfuerzo a traducir cuentos franceses del siglo pasado y a hablar con el retrato de su esposa, fallecida unos años atrás.
Pero su tranquila existencia se verá alterada por la irrupción en su vida de Monteiro Rossi, un joven filósofo al que Pereira contrata para escribir necrológicas de grandes escritores. Lejos de colaborar en la sección de cultura, el joven se entrega a la causa republicana de los españoles causando no pocos problemas al pacífico periodista. A pesar de desear mantenerse lejos de los conflictos, la moral de Pereira le obliga a posicionarse y ayudar a Monteiro Rossi a salir de un atolladero que tendrá nefastas consecuencias.
*** Fin de Spoilers! ***
Aunque no es una novela “preciosa”, aplicando el significado estricto de la palabra, inspira una enorme ternura. Está muy bien narrada y sus capítulos son cortos, algo que siempre agradezco ya que mejora en gran medida la agilidad de la lectura. Los personajes están perfectamente retratados, sobre todo el protagonista Pereira, un periodista setentón y entrado en carnes, viudo, con problemas de corazón y unas dudas existenciales que a su edad no hacen más que trastornarle.
El autor del libro, el italiano Antonio Tabucchi, lo escribió en 1994 inspirándose en un periodista real del que oyó hablar en Portugal, país del que es un enamorado. De hecho, Tabucchi es conocido por ser uno de los más importantes críticos y traductores del portugués Fernando Pessoa. “Sostiene Pereira” fue llevado al cine en 1996, siendo interpretado el papel principal por Marcello Mastroianni apenas un año antes de su muerte. El comentario sobre la película, mañana.
The Knack - Your number or your name (1979)
Hace 5 horas
Recuerdo haber visto ese libro por casa de mi abuela, de cuando aún vivía con ella, la mismísima edición, después de comprar el suplemento semanal de La Voz un domingo...
ResponderEliminar... tengo que leerlo ahora que conozco la sinopsis.
Un fuerte abrazo desde el Otro Lado.
P.D. Espero que todo haya vuelto a su lugar en tu vida ;)
Hola
ResponderEliminarPues tengo que reconocer que no he leído este libro, ni ningún otro del autor. La película, me da que tampoco la he visto. No tiene mala pinta.
Un saludo.
Juan.
Borja, no sabes lo que echo de menos las colecciones literarias de "La voz de Galicia" y otros periódicos gallegos. En Canarias no sacan más que vajillas y televisores por cupones :/
ResponderEliminarTodavía sigo recolocando mi humilde existencia, pero estoy en ello. Gracias por los ánimos :)
Juan, te recomiendo más el libro que la película, sin duda, sobre todo si te llama la atención la historia. Yo no he leído nada más de este autor tampoco, pero "Sostiene Pereira" merece la pena.
saluditos