sábado, 30 de enero de 2010

¿Por qué el pollo cruzó la carretera?

Estoy segura de que la mayoría de vosotros conocéis el famosísimo manifiesto de internet que analiza esta cuestión de máxima importancia: Por qué el pollo cruzó la carretera? Revisando varios blogs en los que se ha publicado esta lista de motivos (entre ellos Emezeta y A cara de Perro, de donde saqué también la imagen), así como los comentarios aportados por sus lectores, he confeccionado una lista más amplia con las razones del presunto pollo para decidir atravesar la carretera. Ahí va!

¿Por qué el pollo cruzó la carretera?

Maestro de primaria: Porque quería llegar al otro lado.

Profesor de secundaria: Aunque se lo explique, queridas bestias, no podrán entenderlo.

Catedrático de Universidad: Para saber por qué el pollo cruzó la carretera (tema que se incluirá en el parcial) lean los apuntes desde la página 2 a la 350.

Platón: Porque fue en busca del bien y la armonía. Está en la naturaleza de los pollos cruzar la carretera.

Karl Marx: Era una inevitabilidad histórica y dialéctica.

Martin Luther King: Veo un mundo en el que todos los pollos serán libres de cruzar la carretera sin que sus motivos se pongan en cuestión.

Sigmund Freud: El hecho de que estés preocupado porque el pollo cruza la carretera revela tu inseguridad sexual.

Moisés: Y Dios bajó de los cielos y le dijo al pollo: Cruza la carretera. Y el pollo cruzó la carretera, y todos se regocijaron.

Maquiavelo: La cuestión es que el pollo cruzó la carretera. ¿A quién le importa el por qué? El fin de cruzar la carretera justifica cualquier motivo.

Charles Darwin: A lo largo de grandes períodos de tiempo, los pollos han evolucionado naturalmente de modo que ahora tienen una disposición genética a cruzar carreteras.

Albert Einstein: Tal vez el pollo se haya quedado quieto y se haya movido la carretera. Depende del marco de referencia. Todo es relativo.

Buda: Preguntar eso niega tu propia naturaleza de pollo.

Nietzsche: Los pollos no existen.

El Papa: Y ahora pollo, para que te perdone todos tus pecados, debes peregrinar al otro lado de la carretera...

Bill Gates: Acabamos de lanzar el Microsoft Chicken 2010, que no sólo cruza carreteras, sino que pone huevos, independientemente de su sexo, archiva tus documentos importantes y hace cálculos complejos. El pollo requiere mínimo 512MB de RAM

Soporte técnico informático: No he detectado que el pollo haya cruzado la carretera. Resetea el pollo y si sigue cruzando, formatéale la carretera.

Abogado: Señores... El artículo 387 del respectivo código aviar de procedimientos deja en claro que mi defendido, alias "el pollo", estaba en todo su derecho de cruzar la carretera.... No veo por qué cuestionar una típica conducta lícita de este sujeto.

Estadístico: Un pollo es atropellado cada 6 segundos en el mundo....


Político viendo las estadísticas: Debido a la alta tasa de atropellos en las carreteras, nos vemos en la situación de prohibir cruzar a los pollos.

Boris Izaguirre: Seguro que el pollo cruzó porque le gustaba más la acera de enfrente…

Vecina: ¡No te vas a creer lo que hizo el pollo del 4ºB! ¡Ni te lo imaginas!

viernes, 29 de enero de 2010

AzulOscuroCasiNegro

Esta película estaba precedida de unas críticas bastante buenas y por eso me decidí a verla, aunque no conocía nada del argumento, como suele ser habitual en mí. No ha sido una decepción pero tampoco me ha parecido una gran película. Es entretenida, bastante coherente, pero tiene detalles que para mí están fuera de lugar, como algunos toques de humor estúpido que no encajan con el resto del tono agridulce del film.

El caso es que
“AzulOscuroCasiNegro”, escrita y dirigida por Javier Sánchez Arévalo en 2006, no se diferencia mucho de esas películas costumbristas de perdedores que quieren ganar pero que al final casi nunca lo consiguen. He de decir que los protagonistas, salvo Antonio de la Torre, que ya me había gustado mucho como Morsa en “Una palabra tuya”, no consiguen transmitirme su amargura, porque no me creo que alguien pueda estar tan taciturno permanentemente o que la inexpresión sea sinónimo de sufrimiento. Demasiada contención durante demasiados minutos, creo yo.

*** Spoilers! ***

Jorge trabaja en la portería de su edificio, mientras estudia y cuida a su padre, que ha perdido la razón tras un infarto cerebral. Jorge se siente culpable, porque su padre sufrió aquello el mismo día que él le decía que se marchaba, que no quería seguir sus pasos como portero. Mientras, el hermano mayor de Jorge, Antonio, sale de la cárcel y se encuentra fuera con un mundo vacío, un padre impedido y un hermano receloso y frustrado ansioso por dejar atrás el mundo que le ata.

Antonio se ha enamorado en prisión de Paula, una mujer que sólo aspira a quedarse embarazada para que la trasladen al módulo de maternidad y dejar así de sufrir las agresiones de sus compañeras de reclusión. Pero ante los problemas de fertilidad de Antonio, ambos deciden pedirle a Jorge que cumpla con ese requisito, algo a lo que al final el joven accede, acudiendo cada mes al bis a bis con Paula a la cárcel. Como era de esperar, entre ellos surge lo inevitable y la situación se complica en ese extraño triángulo.

En paralelo, figuran las historias accesorias de la vecinita rica del edificio, de la que Jorge siempre ha estado enamorado discretamente, y su amigo Israel, que acaba de descubrir que su padre tiene tendencias homosexuales, con el consentimiento inexplicable para él de su madre, mientras él mismo comienza a dudar de sus propias inclinaciones.

*** Fin de Spoilers! ***

En general la historia se hace muy previsible. Los personajes están cortados por un patrón un tanto simple y sólo un buen ensamblaje hace que la película se deje ver, porque pierde bastante interés a medida que va avanzando el metraje. No ofrece nada nuevo y las escenas que pretenden marcarnos como espectadores se quedan en flojas tentativas. Como digo, en general es correcta, pero le falta espontaneidad, credibilidad, no sé, se me antoja como una película muy académica, muy medida.

También me han hablado bastante bien de la última producción de este mismo director, “Gordos”, pero creo que dejaré pasar un tiempo antes de verla, ya que prefiero que mi nivel de frustración cinematográfica vuelva antes a su cota habitual. Está claro que para ser un debut en pantalla grande “AzulOscuroCasiNegro” no está mal y supera con creces la media habitual de calidad, pero decir que es una gran película para mí sería excesivo. Yo lo dejaría en interesante, un aprobado alto, vamos, pero habrá que limar muchos detalles para que las películas de Sánchez Arévalo se acerquen a la cima de mis preferencias.

miércoles, 27 de enero de 2010

Scorpions

Esta semana el veterano grupo de rock y heavy alemán Scorpions anunciaba en su página web su retirada. El próximo mes de marzo sacarán al mercado un último disco de estudio que presentarán en directo en una gira mundial durante los siguientes meses. Los cinco miembros de banda, liderados por el vocalista Klaus Meine y su característica gorra de cuero, aseguran que, tras más de 40 años en activo, se encuentran en plena forma y que así quieren terminar su carrera.

Los que me seguís habitualmente sabéis que el heavy meatal no es el género musical que más escucho, aunque es inevitable conocer determinados hits que han hecho historia. A Scorpions le pasa lo que a tantos grupos de hard rock: al final, se les recuerda más por una balada. En este caso, el tema “Still loving you” es una de sus marcas de identidad, sin olvidar el
“Wind of change” que tanto significado tuvo tras la caída del Muro de Berlín. Otra de sus canciones más conocidas no es otra que “Send me an angel” que, en efecto, es otra lenta.

Dentro de sus más de veinte álbumes también hay, por supuesto, muchas canciones rockeras como “Rock you like a hurricane” o “Blackout”, pero que personalmente ya no conozco ni me atraen demasiado. Yo he elegido para que suene en Lillusion ese “Still loving you” tan lleno de fuerza dentro de lo simple que es lo que transmite: “todavía sigo amándote”. Que lo disfrutéis.


domingo, 24 de enero de 2010

TV callejera

Desde hace unos años se han puesto de moda los programas televisivos de reportajes de actualidad con cámara al hombro. Este formato puede verse por ejemplo en “Comando Actualidad” de Televisión Española o “Denominación de origen” en La Sexta, pero el referente de todo el género es sin duda “Callejeros”, que emite Cuatro.

Gracias a estos programas (o por culpa de ellos, que eso aún no lo tengo muy claro) muchos hemos conocido lo peorcito de nuestro país, los barrios más conflictivos, los puntos negros de la droga y la pobreza más extrema de cada ciudad en forma de edificios ruinosos. Tengo que reconocer que yo siempre he vivido en ciudades pequeñas y había visto muy en la distancia toda esa marginación social y esa delincuencia que, ahora cada vez más, domina el extrarradio, y a veces incluso el mismo centro, de nuestras urbes.


Hablamos de barrios que a lo mejor a algunos de vosotros os suenan: Las 3.000 Viviendas, El Vacie, Los Pajaritos, Torreblanca (Sevilla), La Mina (Sant Adrià de Besòs-Barcelona), El Raval (Barcelona), Sa Penya (Ibiza), Son Banya (Mallorca), El Cabanyal (Valencia), Los Asperones, Palma-Palmilla (Málaga), Los Colorines (Badajoz), El Puche (Almería), Cuesta Piedra, San Matías (Santa Cruz de Tenerife), El Polvorín, Jinámar (Las Palmas de Gran Canaria), Las Barranquillas, Orcasitas, Pan Bendito (Madrid), Las 600 (Albacete), Las Mil Viviendas, Virgen del Remedio (Alicante), San Francisco (Bilbao), Penamoa (A Coruña), Polígono de Almanjáyar (Granada), Oliver, El Gancho (Zaragoza), Los Vikingos (Córdoba), Espíritu Santo, La Paz (Murcia). Como no los conozco personalmente, me gustaría saber si todos esos barrios que he nombrado y que tienen fama de conflictivos son realmente tan peligrosos como los pintan, o son simplemente distritos humildes donde los edificios antiguos comienzan a dejar notar el paso de los años.

En algunos casos, como en El Raval barcelonés, se unen ciertas calles muy peligrosas con otras históricas o típicas de las salidas nocturnas, con bares y locales de ocio, mientras que algunos de los barrios considerados como “malos” lo que sufren básicamente es la dejadez y el vandalismo urbanístico, lo que los hace parecer auténticos polvorines. La mayoría de estas zonas son poblados chabolistas, zonas viejas con alto porcentaje de población gitana y de otras etnias, mucha inmigración, problemas de prostitución y, sobre todo, presencia continua de drogas. Muchas calles de esas barriadas son conocidas como supermercados de la droga, que suele ser el principal motivo de su mala fama.

Pero es curioso que cuando entran las cámaras de TV a esos lugares sin ley resulta que allí nadie vende drogas (puede que dos calles más allá sí, pero allí mismo, jamás), nadie consume nada de nada (bueno, sólo algún porrito de vez en cuando, ya sabes), están todos los entrevistados en paro porque nadie les da trabajo (se les ve hacendosos buscando, allí sentados al sol los lunes, los martes, los miércoles… mientras tintinean sus cadenas de oro) y, esto ya no sé cómo decirlo, se dedican a hacer trompos por las pistas de tierra con coches que cuestan lo que cualquier currito de a pie gana en seis meses. Eso por no decir que ellos ven el “Callejeros” en una televisión plana diez pulgadas más grande que la mía.

Expulsado el párrafo demoníaco que me carcomía, puedo volver al tono documental del post. La exclusión social y la marginación se han adueñado de barrios que, por su condición humilde y su antigüedad, son caldo de cultivo para todo lo demás que pueda venirles encima. Igual que el dinero llama al dinero, supongo que la pobreza sólo llama a más pobreza. Conocer toda esa depresión social me hace pensar, como casi siempre, que el problema de fondo es la educación y no la escasez en sí.

Muchos de los colectivos más desfavorecidos (no todos, pero muchos sí) se automarginan y se deshacen en críticas al Gobierno por no darles más ayudas, pero no muestran tampoco interés por cambiar o mejorar su situación, porque además no consideran que su manera de hacer las cosas sea cuestionable. A mí es que me cuesta mucho entender por qué casi todos los parados que aparecen en estos reportajes tienen un cigarro en la mano, cuando con el dinero que se gastan en fumar podrían pagar la comida de toda la semana. Pero entrando ahí me salgo un poco del tema que quería tratar.

La solución para las miles de familias que malviven en los asentamientos chabolistas de las afueras de algunas ciudades pasa por el desmantelamiento de esos poblados y el realojo de las familias en otras viviendas. Así ha ocurrido por ejemplo con el coruñés poblado de Penamoa, invadido por los drogadictos, donde sus vecinos están siendo realojados en otras casas para construir en los terrenos una circunvalación. Es importante en esos casos dispersar al grupo para evitar que los problemas de venta de drogas, en caso de haberlos (para qué engañarnos, realmente es lo habitual), se trasladen con los inquilinos al nuevo barrio.

Llegaremos así a la conclusión de que el problema no está en el barrio en sí (una casa no suele atacarte…) sino en sus moradores y que todas las zonas tienen su riesgo potencial. Eso sí, si algún barrio sale en “Callejeros” yo no pasaría por allí ni con escolta policial, porque además la Policía es muy mal recibida en esos lugares, paradojas de la vida. Y si la zona se llama “Las xxx Viviendas”, mejor huir, que seguro que no es buen sitio para ir de compras... a no ser que tengamos claro lo que vamos a comprar.

*** Para elaborar esta entrada me he guiado por la documentación visual del programa “Callejeros” y por algunos foros de internet con debate sobre barrios conflictivos. Las imágenes son de "Callejeros" y sacadas por mí del Street View de Google.

viernes, 22 de enero de 2010

El intercambio (Changeling)

Una de las últimas películas dirigidas por Clint Eastwood es "El intercambio", en el original "Changeling", palabra con una difícil traducción al castellano. Literalmente se podría entender como "cambiazo", concretamente referido al cambio de bebés en sus cunas, aunque en español podría aplicarse a otras muchas situaciones. De hecho, yo pensaba que la película iba de una cosa y al final iba de otra…

Personalmente me suele gustar bastante el cine de Eastwood, pero esta película no se encuentra entre sus mejores obras. Se trata, eso sí, de una producción más que correcta, con una historia aceptable y una buena interpretación de
Angelina Jolie, que fue nominada al Oscar por este papel, pero en general a la película le falta un pelín de fuerza. También puede ser que el bueno de Clint nos tenga mal acostumbrados y cuando baja un poquito el listón ya nos quejamos. Lo cierto es que esta producción pasó un poco desapercibida, quizás porque Angelina Jolie tiene muchos detractores (a mí me encanta esa mujer, francamente… y su marido también!) o quizás porque se estrenó en 2008 casi a la par que una gran obra maestra del director californiano “Gran Torino”.

*** Spoilers! ***

La película cuenta la historia de Christine Collins, una madre soltera que un día sufre la desaparición de su único hijo, Walter. La época en la que se desarrolla la cinta, los años veinte, está dominada por la corrupción política y policial, por lo que nadie en la ciudad de Los Angeles está muy dispuesto a ayudar a la mujer sin obtener nada a cambio. Sin embargo, un día aparece un niño que dice ser Walter Collins, con lo que la Policía tiene la mejor oportunidad para colgarse una medalla y promocionar su buen hacer ante la sociedad. Sólo hay un problema: el niño no es Walter y su madre se niega a que la traten como a una loca que no reconoce a su propio hijo.

Sin pistas, sin esperanza, sufriendo la soledad y la desesperación de tener que convivir con un niño que afirma ser su hijo pero que no lo es, Christine recibe un día la visita del reverendo Briegleb (John Malkovich), que critica la dudosa eficacia de la policía local y denuncia la corrupción de la ciudad a través de su programa de radio. Pero ni él puede evitar que encierren a Christine en un hospital psiquiátrico, puesto que la madre sigue manteniendo que ése no es su hijo y que la policía no hace nada por encontrar al verdadero Walter.

La aparición de otro chico que declara las perversas actividades de su tío en una granja del desierto comienza a arrojar luz sobre el caso. Se destapa así la personalidad de un asesino en serie de niños, desequilibrado y condenado a la horca, aunque para la madre de Walter no habrá nunca consuelo si no se confirma que su hijo murió en aquella macabra granja, descuartizado y enterrado bajo la arena.

*** Fin de Spoilers! ***

Basada en hechos reales, la historia está bien contada, como no podía ser de otro modo, y mantiene el interés hasta el final. Los aspectos técnicos y artísticos están también cuidadísimos, lo que hace que la película se vea con agrado. Aún así, para mí le falta algo, un toque de pasión quizás, de fuerza, un “algo” que hace que no termine de llegarme del todo. Creo que el término puede ser que la película es un poco aséptica, o que noto menos implicación emocional, a pesar del tema, que en otras películas de
Clint Eastwood, más personales y viscerales. No deja de ser una realización notable, pero recomiendo mucho más “Gran Torino”, por ejemplo.

miércoles, 20 de enero de 2010

The Human League

The Human League es una banda británica formada a finales de los setenta, que fue pionera en la introducción de los sintetizadores en el pop de su país. Son conocidos realmente como un trío, un chico (Philip Oakey) y dos chicas (Susan Ann Sulley y Joanne Catherall), aunque en sus inicios el grupo era más amplio y estaba compuesto, como no, por antiguos compañeros de colegio.

Tuvieron un enorme éxito en los ochenta y, aunque yo no era (ni soy) seguidora de su música, tienen algunas canciones que se han convertido en grandes clásicos de la época. “Love action (I believe in love)”, “(Keep Feeling) Fascination”, “Don’t you want me”, o “Human” son algunos de aquellos primeros hits, todos editados en los primeros años de la década. Aunque siguen en activo y han publicado una decena de discos, parece que su música electrónica no ha vuelto a calar como entonces.

Personalmente me aburre un poco escucharlos durante mucho rato, pero es inevitable que suene en Lillusion su
“Don’t you want me”, que seguro todos conoceréis. El tema sonaba allá por 1981 y estaba incluido en su disco “Dare”, uno de los que mejores ventas le reportaron a la banda.


martes, 19 de enero de 2010

Loving Home

Como este fin de semana he estado liada y no he podido preparar ningún post en condiciones, aprovecho para poner una foto que me quedaba pendiente del 2009. Fue tomada durante las vacaciones de Navidad, en mi casa de Santiago de Compostela. No es que tenga ningún significado especial, pero me apetecía ponerla.

Le he hecho una pequeña modificación con el Photoshop, añadiéndole el texto, unos cuantos detallitos y trabajando un poco el color. El resultado me ha gustado bastante, así que ahí va, especialmente para mi familia que sé que me lee :)

sábado, 16 de enero de 2010

3 Días

No esperaba gran cosa de una película española con un planteamiento de cine apocalíptico, que es lo que se vendía de “3 días”. Nuestro particular “2012” no es ninguna obra paradigmática de la ciencia ficción pero sí es un ejemplo de cómo no se necesita un gran presupuesto para hacer una buena película, y más teniendo en cuenta que toca el género del thriller, tan poco y mal trabajado en nuestro país.

*** Spoilers! ***

Se trata en realidad de un drama psicológico, con toques de terror y suspense, que mezcla dos historias relacionadas con el presente y el pasado del protagonista principal, Ale, interpretado por el actor
Víctor Clavijo. En una época indefinida las noticias anuncian que un meteorito alcanzará la Tierra en el plazo de tres días, sin esperanza alguna de supervivencia para la raza humana. Mientras se suceden las escenas de pánico por parte de la población, la madre de Ale (Mariana Cordero) está sólo preocupada porque las cárceles han abierto sus puertas debido al caos y ella cree que el asesino de su hijo mayor volverá veinte años después para acabar también con la vida del pequeño, que se salvó de una matanza infantil sin precedentes.

Ajeno a toda la paranoia de su madre, y con no poca incredulidad ante sus sospechas, Ale se traslada con ella y sus cuatro sobrinos pequeños al campo y simplemente espera la llegada de la catástrofe, frustrado y desencantado de la vida que le ha tocado vivir. Pero todo da un giro imprevisto cuando su madre muere en extrañas circunstancias y un desconocido, Lucio (Eduard Fernández), aparece a las puertas de la casa, haciéndose pasar por un amigo de la familia. Ale, que no sabe qué fue realmente lo que ocurrió cuando era niño, comienza a desconfiar y a buscar la manera de salvar a sus sobrinos y a sí mismo de la venganza de aquel hombre, aunque sólo sea para mantenerse vivos tres días más.

He de decir que la fotografía de esta película me parece fantástica y la ambientación muy acertada, llena de tonos ocres y polvorientos típicos del verano de la campiña andaluza. Está muy lograda también esa sensación de miedo hacia lo desconocido, la cercanía del desastre, la desesperación ante un final ineludible y la sensación de que el tiempo se ha detenido en mitad de la nada. Se crea un choque perfecto entre la inocencia infantil y la preocupación adulta, con unas actuaciones muy correctas de todo el reparto, incluso de los niños, que suelen desentonar a veces en las películas por su poca espontaneidad.

*** Fin de Spoilers! ***

Aunque el final no es demasiado original y tiene tintes un poco noventeros, tampoco chirría dentro del conjunto y, en general, la película está bien resuelta. La idea era arriesgada y el joven director y guionista
F. Javier Gutiérrez ha sabido llevarla a buen puerto, confeccionando un interesante debut en el largometraje tras sus dos cortos anteriores. Ese trabajo le llevó a ganar el prestigioso Festival de Cine Español de Málaga, al que llegó siendo una película prácticamente desconocida. El film nació además con vocación internacional, como ya es casi imprescindible en cualquier trabajo, llevando el título en inglés de “Before the fall”.

Para variar, he leído muchísimas críticas negativas sobre esta producción, desde su previsibilidad hasta las malas interpretaciones, pasando por la inconsistencia de guión. Está claro que no todos pedimos lo mismo a una película. Yo pido que la historia me enganche, que me crea lo que me cuentan y que me haga emocionar de algún modo, y “3 días” para mí lo consigue, a pesar de que tenga algunos altibajos. También hay mucha gente con prejuicios de base hacia el cine español, pero yo, dentro de lo posible, siempre que veo una película intento que su nacionalidad se mantenga en los créditos y no en la historia.

viernes, 15 de enero de 2010

Más regalitos de amigurumi

Estas Navidades entregué a sus destinatarios un par de amigurumis que tenía guardados sin publicar para no estropear la sorpresa. Se trata de otro pollo (como el ajo, no? Es que no sé hacer mucho más… :P) que en este caso fue para NimRi, y una flor que es una creación nueva y semi-inventada, que le regalé a mi amiga Brandelia. Ambos son excepcionales fotógrafos, por cierto, así que no dejéis de visitar sus sitios!

Para hacer el pollito utilicé lana amarilla y seguí el mismo patrón de siempre, que podéis encontrar en un vínculo del post dedicado a los animales de pluma. Junto con una etiqueta de autoría, lo coloqué en una cajita preciosa que compré en una multitienda asiática (un chino, vamos).

Para la flor hice una esfera amarilla y seis pétalos azules, sin relleno y cosidos alrededor. Por detrás se le puede colocar un imperdible y convertirla en un broche, ya que el tamaño es el de la palma de la mano aproximadamente.

En mi último viaje a Santiago hice una pequeña compra de lanas, botones y otros objetos necesarios para continuar con la fiebre del amigurumi, así que próximamente presentaré nuevos bichejos. Tengo en mente hacer un osito decente, ya os contaré si lo consigo. Mientras, os recomiendo que visitéis la página de Moon’s Creations, una web fantástica de una chica estadounidense con amigurumis realmente preciosos y divertidas recreaciones de personajes de películas y libros.

miércoles, 13 de enero de 2010

Elvis Presley

El pasado 8 de enero se celebró el 75 aniversario del nacimiento de Elvis Presley. Aunque muchos afirman que Elvis vive, la realidad es que el “Rey del Rock’n’Roll” nos dejó el 16 de agosto de 1977 y desde entonces su leyenda no ha dejado de crecer. Su muerte, a los 42 años, causó una verdadera conmoción, y eso que en sus últimos años la imagen seductora del cantante ya se había degradado a pasos agigantados, debido sobre todo a sus excesos con la comida y las drogas. La separación de Priscila Presley en 1972 lo dejó sumido en una gran depresión de la que nunca llegaría a reponerse.

Pero en sus mejores años sobre el escenario Elvis supuso una auténtica revolución musical. Sus movimientos pélvicos cautivaban a los jóvenes (sobre todo jovencitas alocadas que gritaban como poseídas en sus conciertos) y escandalizaban a los mayores, mientras sus canciones sonaban en todas partes y traspasaban las fronteras de los Estados Unidos.

Su fama propició que actuara en una
treintena de películas desde mediados de los cincuenta hasta finales de los sesenta, todas de calidad muy mediocre y destinadas exclusivamente al lucimiento personal del cantante. Él mismo era quien componía las bandas sonoras de estos films, que le reportaron enormes beneficios económicos y le hicieron llegar a mucho más público. El cine y la televisión se han aprovechado del éxito de sus mejores temas, haciéndolos sonar en más de 300 producciones.

Más de 75 discos son el resultado de una carrera repleta de éxitos y con un triste final, como suele ocurrir con las grandes estrellas que se acaban convirtiendo en mitos. Durante muchos años fue el artista fallecido más rentable, logro que quizás le sea arrebatado en breve por su hermano pequeño, el “Rey del pop”, Michael Jackson.


martes, 12 de enero de 2010

Malas temporadas

En las últimas semanas me ha dado por el cine patrio. Hace ya unos meses puse en el blog una canción interpretada por Marlango, el clásico "Vete" de Los Amaya. El tema había sido creado para la banda sonora de la película "Malas temporadas" y para saciar mi curiosidad, finalmente me he decidido a verla. Se trata de una muestra de cine social mezclado con el drama, algo bastante común en España.

Mi veredicto es un regular, porque aunque Leonor Watling tiene una actuación espectacular, la película en sí es algo floja y parte del argumento está cogido con alfileres.

*** Spoilers! ***

Así por encima,
“Malas temporadas” narra unas cuantas historias paralelas que se entrecruzan en algún punto. En esos hilos conductores aparece la activista de un grupo de apoyo a inmigrantes; su hijo de 13 años que está pasando una crisis adolescente y se niega a salir de su habitación; un cubano que se dedica al tráfico de arte entre Cuba y España, que en su llegada al país tuvo un lío con la activista; un ajedrecista que acaba de salir de prisión, marcado por la atracción hacia su compañero de celda, y no encuentra su lugar en el mundo hasta que comienza a dar clases al hijo de la activista; y una paralítica independiente pero frustrada ante la vida, que se acuesta con el cubano que le consigue las obras de arte a su marido.

Las interpretaciones en general son bastante correctas (Nathalie Poza como la trabajadora social Ana obtuvo una nominación a los Goya), aunque como he dicho, para mi gusto
Leonor Watling se come a casi todos los demás en su papel de Laura, una mujer atada a una silla de ruedas de por vida. Ni siquiera Javier Cámara, el otro reclamo del film, consigue crear suficiente interés por su personaje, que se pasa de misterioso y se limita a deambular de un lado a otro intentando reconstruir su presente a partir de su pasado antes de la cárcel.

*** Fin de Spoilers! ***

A pesar del potencial interés de las historias entrelazadas, la película en sí es demasiado lenta, con un excesivo protagonismo de la música, que suena por todas partes restando fuerza a todo lo demás. Además, el sonido directo es pésimo, tanto que hay frases completas de guión que no se entienden, entre lo malo del audio y la deficiente vocalización de algunos actores. El planteamiento del film es interesante pero yo creo que falla mucho en el ritmo, lo que convierte la película en un producto irregular y a veces un poco aburrido por los larguísimos
planos secuencia.

El realizador
Manuel Martín Cuenca dirigió “Malas temporadas” en 2005, después de haber tenido un debut más que aceptable en la pantalla grande con “La flaqueza del bolchevique” un par de años antes. Personalmente, la película no me ha enganchado lo suficiente pero hay que reconocer que el director parece tener talento y en el futuro puede hacer cosas mucho más interesantes.

sábado, 9 de enero de 2010

Puzzle "Los Amantes", de Victoria Francés

Terminé este puzzle en las últimas semanas del 2009, antes de las vacaciones navideñas. Se trata de una ilustración de Victoria Francés que lleva el título de “Los Amantes” y que me regaló GeekDraz por mi último cumpleaños. El puzzle tiene 1.500 piezas y mide 60 x 85 centímetros, en vertical.

La verdad que es un puzzle complicado pero he disfrutado mucho haciéndolo, porque la imagen es realmente preciosa. Los dos ratoncitos que se ven en las fotos son dos peluches de IKEA que me ayudaron a seleccionar las piezas, sino a ver cómo iba a conseguirlo yo sola :P

Hace unos meses hablé precisamente de Victoria Francés en un
post dedicado a las jóvenes ilustradoras femeninas. La dibujante española, que inició su andadura publicando en la importante Norma Editorial, se ha situado ya en un destacado lugar del panorama del dibujo y la ilustración nacional e internacional.

Le empresa Educa tiene en su catálogo una decena de obras de esta autora en forma de puzzle, dentro de su sección Puzzle Passion dedicada a adultos. Esta
serie Victoria Francés incluye puzzles de entre 500 y 1.500 piezas, todos de inspiración gótico-romántica.

Mi vena puzzlemaníaca va a descansar durante las próximas semanas, ya que necesito la mesa para otros menesteres, pero prometo atacar otro en cuanto me sea posible.


jueves, 7 de enero de 2010

Cinco moscas azules

Ya estoy de vuelta! Llevo muchos días sin publicar nada y quiero retomar el blog con algunas reseñas y actividades pendientes del 2009. Hace muchos años leí “Pequeñas infamias”, de Carmen Posadas, una novela de la que en realidad ya no recuerdo nada pero que sé que me gustó bastante. Hace unos meses leí de la misma autora “Juego de niños”, un libro que también me transmitió buenas vibraciones y que reseñé en Lillusion.

Por ese motivo decidí coger en la biblioteca “Cinco moscas azules”, pero no me ha aportado tanto como esperaba y se ha convertido en ese tipo de obra cansina que lees por leer deseando que se acabe ya.

Como he dicho, suele gustarme Posadas como escritora, su forma de generar interés sobre sus personajes y sus circunstancias, pero en el caso de “Cinco moscas azules” ese modo de discurrir de la obra se me ha antojado ficticio y en exceso rebuscado. El hecho de retrasar una y otra vez la información ha terminado por sacarme de quicio y, al menos en mi caso, ha logrado el efecto contrario a despertar mi interés. No he empatizado con los personajes, demasiado marcados por clichés y tópicos y, lamentablemente, no he acabado de encontrarle el sentido a la obra.

*** Spoilers! ***

El libro, escrito en 1996, cuenta la historia de Rafa Molinet, un español entrado en años, homosexual exiliado que acaba de perder a su madre y, ya maduro y solo, decide poner fin a su vida, no sin antes disfrutar de unas merecidas vacaciones a fondo perdido en un elegante hotel marroquí. Allí coincidirá con unos cuantos miembros de la alta sociedad madrileña, a los que estudiará con detenimiento y que le harán modificar en parte sus planes, incluyendo en ellos el asesinato como puro divertimento.

*** Fin de Spoilers! ***

La frivolidad es uno de los puntos fuertes de la novela, algo que no me agradó demasiado. Es cierto que Posadas ha usado elementos semejantes en otras obras, pero concretamente en ésta incluso me ha molestado tanta estupidez. Creo que la novela está pasada de moda, viéndose claramente los estragos del paso del tiempo en los caracteres de los personajes. Además, es demasiado larga para lo que cuenta, y al final ni siquiera sorprende, por lo que tanto misterio narrativo pierde su sentido.

Es una pena que una obra no te llene a medida que la lees, que te des cuenta de que no te está aportando nada pero, aún así, no quieras dejarla de lado para darle al menos una oportunidad. Para mí este libro es un aprobado muy raspado, por lo que recomiendo leer a
Carmen Posadas, a la que considero buena escritora, pero no esta novela en concreto.