domingo, 29 de julio de 2018

Dublín (IV): Primera Parte: St. Patrick's Cathedral y Christ Church

Entrada a St. Patrick Park
Nuestra cuarta jornada en Dublín tenía un marcado carácter espiritual, ya que fue la que reservamos para visitar la Catedral de San Patricio (Saint Patrick's Cathedral). La iglesia original de madera se construyó en el S.V al lado de un pozo donde, según la leyenda, San Patricio bautizaba a los paganos que se convertían al cristianismo. Hacia el año 1.200 fue cuando se inició el proyecto en piedra que, con el paso de los siglos, sufrió varias reformas y ampliaciones.

Sir Benjamin Lee Guinness en el St. Patrick Park
Interior Catedral St. Patrick
Esta preciosa catedral anglicana pertenece a la Iglesia de Irlanda, segunda comunidad cristiana del país tras la Iglesia Católica. Arquitectónicamente tiene una torre característica con uno de los carillones más grandes de Irlanda y en la nave central un bonito coro, al que dan mucha importancia ya que se ofrecen misas cantadas diarias. Sobre el coro están los estandartes y las banderas de armas de los Caballeros de San Patricio, orden fundada por el Rey Jorge III en el s.XVIII.

Coro y banderas de armas de los Caballeros de San Patricio
Puerta del Capítulo
En uno de los laterales del edificio también se puede observar la Puerta del Capítulo, a través de la cual dos familias enfrentadas, los Butler de Ormonde y los Fitzgerald de Kildare, sellaron su reconciliación en 1492. Además se exhiben banderas en recuerdo de los regimientos irlandeses del Ejército Británico. En una parte de la nave está el Árbol del Recuerdo, un monumento creado en 2014 para conmemorar el centenario de la I Guerra Mundial y el horror de la destrucción.

John Neill Boyd, St. Patrick Cathedral
Púlpito de St. Patrick, St. Patrick's Cathedral
Uno de los principales atractivos de la Catedral de St. Patrick es todo lo relacionado con Jonathan Swift, el famoso escritor de "Los viajes de Gulliver. El autor fue deán de la catedral entre los años 1713 y 1745 y está enterrado en ella, junto con su compañera Stella. Tiene un púlpito con su nombre, desde el que se dirigía a los fieles, y también se muestran algunos objetos personales del escritor, como una máscara mortuoria, elementos bastante típicos (y un tanto macabros) de la época para recordar la fisonomía del fallecido. 

Máscara mortuoria de Jonathan Swift
Tumba de Jonathan Swift y su amiga Stella
La catedral está repleta de objetos curiosos y relevantes en la historia, como la silla del Rey Guillermo III de Inglaterra e Irlanda (King William III), que el monarca utilizó para sentarse cuando acudió a St. Patrick a agradecer a Dios su victoria sobre el Rey Jacobo II (King James II) en la batalla de Boyne en 1690. También está la tradicional campana de San Patricio y más símbolos de la historia de la catedral, todos bien conservados y con información adjunta. El templo tiene además una sección interactiva con información sobre la construcción y usos del edificio, sobre el santo que la fundó y algunas actividades educativas para niños. 

Silla del Rey Guillermo III, St. Patrick's Cathedral
Capilla, interior St. Patrick's Cathedral
Banderas de armas, St. Patrick's Cathedral
La entrada para adultos a la catedral nos costó 6,50 € por persona. En el exterior hay un bonito parque que enmarca el conjunto típico de postal que siempre hemos visto de la catedral dublinesa, aunque el día de nuestra visita la luz no estaba en su mejor posición para las fotos.

Parque y catedral de St. Patrick
Catedral desde el Parque de St. Patrick
No muy lejos de allí se encuentra la segunda catedral de Dublín, la Christ Church o Catedral de la Santísima Trinidad, fundada en 1.030 y que siempre ha rivalizado con San Patricio por ostentar los derechos litúrgicos de la ciudad. Finalmente, Christ Church es considerada la catedral oficial de Dublín mientras que la de San Patricio funciona como catedral nacional de Irlanda. La entrada a Christ Church costaba también 6,50 € por persona.

Christ Church, Dublín
Esta curiosa catedral anglicana tiene unos mosaicos realmente espectaculares en los suelos y una bonita pila bautismal. Los colores sorprenden, ya que en las iglesias católicas tradicionales no estamos acostumbrados a ver tanto colorido. Desde su origen medieval, la construcción también pasó por multitud de reformas y restauraciones, como St. Patrick, y conserva por ello vestigios del estilo arquitectónico de cada época.

Púlpito en Christ Church
Entre los reclamos del templo se encuentra la tumba de Strongbow, llamado en realidad Richard Fitz Gilbert de Clare, conde de Pembroke, que fue líder de la conquista normanda de Dublín en el S.XII. La tumba original fue destruida por el derrumbe de una pared, pero en el S.XV crearon un nuevo sepulcro para esta figura. Uno de los detalles más curiosos de esta tumba son las espuelas de la armadura, que obligaron a enterrar (teóricamente) al susodicho con los pies girados y así lo refleja la escultura.

Tumba de Strongbow, Christ Church
Otro de los aspectos destacados de Christ Church es su cripta medieval, la más grande de Irlanda y Gran Bretaña. Data del S.XII y en ella se conservan numerosos objetos históricos y religiosos. No se permiten fotografías de la exhibición del tesoro, pero sí de otros detalles que allí se encuentran, como "The Cat and the Rat", un gato y una rata que quedaron atrapados en un tubo del órgano de la iglesia allá por el año 1.860 y se momificaron con el paso del tiempo. Fueron descubiertos años después cuando desarmaron el órgano, al notar que no sonaba del todo bien. 

The Cat and the Rat, cripta de Christ Church
En los sótanos de la catedral también había en aquel momento una exposición sobre el vestuario de la serie de TV "Los Tudor", que tomó como localización principal el templo para sus tomas de bodas, bautizos y otros actos litúrgicos de la época relatada.

Conectado físicamente con Christ Church está el edificio que acoge Dublinia, una exposición interactiva sobre los vikingos y el Dublín medieval. Decidimos no visitarla, ya que nos pareció una experiencia más adecuada para ir con niños, al estilo de los museos de historia natural, pero ofrece la opción de visita combinada junto con la catedral ya que comparten espacio histórico.

Dublinia conectada por el puente con Christ Church
A la salida se puede constatar precisamente que este espacio está construido sobre un antiguo asentamiento vikingo, que transcurría a orillas del río Liffey, y del que se descubrieron los restos mientras se desarrollaban las obras de unas oficinas públicas. Se ordenó su excavación pero los trabajos no pudieron completarse y el Ayuntamiento de Dublín se ganó serias críticas de sus ciudadanos por continuar con el levantamiento del nuevo edificio institucional. En varias zonas se pueden observar placas en el suelo representando ítems y símbolos familiares descubiertos durante aquellos trabajos arqueológicos.

Dublin Viking's Age Plots, Dublín
De camino hacia nuestro siguiente destino del día también pasamos por la Iglesia católica de St. Audoen. Adyacente a ella hay otro templo del mismo nombre, de confesión anglicana, edificado en 1.212 sobre los terrenos donde estaba enterrado el Obispo de Rouen, y que hoy por hoy constituye la iglesia más antigua de Dublín. Tiene una torre muy significativa con tres de las campanas más antiguas de la ciudad, que datan de 1.423.

Iglesia Católica de St. Audoen
Torre de la Iglesia Anglicana de St. Audoen

*** Haz click en las fotos para ampliar.

*** (Continuará...)