Precisamente hoy, mientras "Alatriste" aterriza con gran estrépito en las pantallas de todos los cines españoles, se me ha ocurrido hacer una breve reseña de la única novela de Arturo Pérez-Reverte que he leído hasta la fecha, "Territorio comanche". Se la recomiendo a todo el mundo no sólo porque se lee en un par de horas, sino porque aporta todo lo bueno de la novela mezclado con ciertas características del reportaje periodístico y la innegable genialidad narrativa de su autor.
Creo recordar que leí este libro sobre el año 1997, recién terminada la carrera de periodismo y todavía debatiéndome entre la ilusión por el mundo de la comunicación y la rebelde aprendiz de escritora que pujaba por salir de mi interior. La novela me encandiló, me vendió todo lo que quería comprar y me generó la típica envidia de todo narrador novel: "yo quiero escribir así". Sin ser uno de los ejemplos típicos de la literatura de Pérez-Reverte, más bien al contrario, pues se trata de un estilo que el escritor de Cartagena ha cultivado poco, muestra la increible capacidad creativa y claridad de ideas de uno de los autores más prestigiosos y más leídos de nuestra época.
La novela cuenta una historia de amistad laboral y personal en el marco de la guerra de Bosnia, la última que cubrió Arturo Pérez-Reverte como periodista. Las obsesiones por el trabajo, por mostrar las cosas como tú las ves en medio del conflicto, la necesidad de sobrevivir en un lugar hostil en el que no sólo está en juego lo material, sino vidas humanas, y cómo es necesario relativizar todo lo que ocurre alrededor para no enloquecer. En un paisaje realista, Reverte tomó vivencias propias de su amplia experiencia en conflictos bélicos durante años para configurar un relato crudo visto a través del objetivo de una cámara de TV.
Cuando se publicó "Territorio comanche", en 1994, ya habían visto la luz algunas de sus novelas más conocidas, como "El maestro de esgrima", "La tabla de Flandes" o "El Club Dumas", todas desarrolladas o tocando en algún punto la historia de hace tres siglos. Sin quitarle en absoluto mérito a uno de los autores españoles más vendidos de todos los tiempos (posiblemente sus competidores en el mercado literario estén ya muertos), siempre me ha dado pereza leer alguna otra novela suya, puesto que el género histórico nunca ha sido mi fuerte y en algunos casos su forma de escribir me ha resultado un tanto espesa para mi simplón montoncito de neuronas. Creo firmemente que muchos leen a Reverte porque está de moda, algo de lo que también intento escapar; ser popular no siempre es sinónimo de ser bueno (aunque tampoco está reñido, ojo, y me atrevo a afirmar que menos aún en este caso).
Uno de los grandes canales de conocimiento a gran escala que ha tenido la literatura de Pérez-Reverte ha sido también el cine. Se han adaptado a la gran pantalla siete de sus novelas y él mismo ha colaborado en el guión de otras dos producciones como autor de la historia original. En concreto la adaptación de "Territorio comanche" realizada en 1997 por Gerardo Herrero me pareció correcta, fiel a la novela original y entretenida, pero tampoco nada espectacular. En general, estas películas han tenido resultados dispares, pero han ayudado a promocionar los libros del escritor español tanto en nuestro país como en el extranjero y (de esto me alegro más) a acercar la lectura a un gran sector de la sociedad que no la consideran importante. Al fin y al cabo, la mejor manera de aprender siguen siendo los libros.
PD. Posiblemente veré "Alatriste" próximamente. Advierto que mi pasión por Viggo Mortensen es notable así que iré predispuesta a un veredicto favorable.
viernes, 1 de septiembre de 2006
Territorio Comanche
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Publicado por
Lillu
a las
15:11
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En el cole leímos en un libro de texto un artículo+entrevista sobre Pérez-Reverte en el que el periodista comentaba que Pérez-Reverte tiene cara de tortuga. Además, en la foto que acompañaba de artículo realmente se le veías tortuga. Desde entonces no puedo evitar pensar en él como el hombre tortuga. Ya ves, qué tonterías, pero es que le veo esta cara ahora!
ResponderEliminarViene a ser como lo de que el lunes sea amarillo, el martes verde, el miércoles naranja, el jueves azul y el viernes rojo. Los fines de semana son grises, claro. :)
los jueves son azules?? mmmm mira tú :P PERO Q COSAS OS ENSEÑAN A VOSOTROS EN EL COLEGIO!?!?!! El hombre tortuga, pobre Reverte! XDDD Pos tendrá cara de tortuga, pero escribir como una tortuga na de na, q no hace más q publicar XD Dale una oportunidad mujer... es como el chiste de las ratitas con el murciélago... "mira, ahí va mi novio" "qué feo, no?" "Sí, pero es piloto".
ResponderEliminarbezitos :)
Ya, es que iba a un cole rarito. xD No he leído nada suyo, pero algún día lo haré. Lo de tener cara de tortuga no es ni bueno ni malo, mira, cada uno es como es, hay pilotos, murciélagos, tortugas... :)
ResponderEliminarBesitos
eu vouna ver mañá (alatriste) para facer a crítica. pero non me apetece nada. e mortensen gústame, pero o trailer promete lixo..:) bicos!
ResponderEliminarPero tú no tabas ya de vacaciones, brandelia?? Deja de ver pelis pal trabajo!! :D
ResponderEliminarbezitos
PD. Los comentarios q he oído lo confirman, es malilla... pero weno, todo será ver y juzgar.